Hay una serie a la que estoy muy enganchada. Se llama The Affair, y aunque por el título nos imaginemos un drama sentimental con poca chicha, lo cierto es que la historia tiene bastante más miga que eso. Y si lo llevamos al campo de las relaciones de pareja, The Affair encierra muchas verdades que no suele ser habitual ver en la televisión o en el cine, donde todo es "chica conoce a chico, se enamoran, y son felices para siempre". El mundo de las relaciones adultas se parece más a esta serie que a todas las comedias románticas al uso. Espero meteros el gusanillo para ver la serie sin hacer spoiler de la trama.
Cada uno ve las cosas a su manera, y siempre hay dos versiones o más de la misma historia
Este es uno de los mejores recursos de la serie, ya que se cuenta la historia desde el punto de vista de los dos personajes, lo cual resulta realmente curioso, porque las versiones no coinciden en absoluto. Como espectador tú vas construyendo tu propia historia, porque ¿cuál de las dos es la verdadera? ¿Fue el hombre el seductor o ella fue provocando hasta conquistarle?
Igual sucede en la vida real: él se cree que te conquistó por sus grandes artes como seductor y tú sabes que hiciste todo lo que había que hacer para que cayera en tus redes. Para ti ese chico es tu novio, pero para él eres un rollito con el que divertirse los fines de semana. Tú crees ser una chica independiente y atrevida, y él cree que eres una fresca. La verdad se sitúa en un punto intermedio, probablemente.
Cuando el deseo se cruza en tu camino no hay nada que lo pare, ni el matrimonio más sólido
¿Echar por la borda un matrimonio feliz de larga duración con varios hijos por una simple aventura? Es posible si el deseo es tan fuerte que lo nubla todo, que te impide pensar con claridad y que ocupa todos tus pensamientos de día y de noche. Hasta que no consigues tu objeto de deseo no paras. Los dos intentan luchar contra su instinto, alejarse.
Tienes que conocer las miserias tu nueva pareja para poder decir que la relación va en serio
Te acabas de conocer y todo es maravilloso, él es la persona más guay del mundo, os amáis con locura y vives bajo el arco iris todos los días. Pero hasta que no conoces su lado oscuro, sus fallos, sus secretos (que todos los tenemos), los aceptas y los comprendes, no se puede decir que la relación sea completa. ¿Es él el padre y el marido perfecto? ¿Qué oscuro secreto y pasado esconde ella que la hace tan misteriosa?
Si tienes hijos nunca te divorcias del todo de tu ex
Cuando no tienes hijos, puedes hacer perfectamente un "si te he visto, no me acuerdo", pero eso no es posible si tienes niños, quienes te unirán a tu ex para siempre y te obligarán a mantener el contacto. Y por el bien de los pequeños y de tu salud mental, es mejor que te lleves bien a pesar del daño que te haya podido hacer.
Echar la culpa a una infidelidad del fin de la relación
La infidelidad no ha sido la culpable, sino que ese engaño ha sido solo la estocada final de una relación que estaba ya rota. Mucha gente se separa por una infidelidad, es el signo más visible de que la relación no va bien. Pero a veces es solo la punta del iceberg. Había algo que no funcionaba de antes, lo que ha llevado a uno de los dos a atreverse a buscar una aventura fuera de la pareja.
¿Estaba él demasiado absorbido con la vida que llevaba y necesitaba un terremoto para sacudirla? ¿Estaba ella asfixiada en una situación que siempre le recordaría el terrible incidente?
Los problemas de pareja que antes eran llevaderos, se pueden hacer un mundo cuando la relación se rompe
Y entonces empiezan los reproches. Porque hasta ahora lo pasabas por alto, lo tolerabas, pero si ya no hay pareja, aprovechas para sacar eso que llevabas dentro y que te has callado tanto tiempo. Cuando sabemos que no hay vuelta atrás, podemos sacar nuestro lado más malvado y más destructivo (incluso autodestructivo). Nadie sabe de lo que es capaz hasta que le pasa, porque manejar el dolor no es fácil.
Ver como la ruptura afecta a cada uno de los matrimonios resulta muy interesante, y los dos ex reaccionan de manera muy distinta.
Según nos hacemos mayores, nuestra mochila es más pesada
A nuestra mochila se van sumando y añadiendo relaciones anteriores que acabaron mal, dramas familiares, problemas económicos y un montón de cosas más. Una relación es más fácil que funcione con 20 años que con 40, porque tu pasado, tu experiencia, hace que seas más receloso, que sea más difícil llegar hasta tu interior. Te vas poniendo corazas que cuesta quitar. Además que todas las cosas que te han pasado a lo largo de tu vida te van condicionando, afectando a la hora de tomar decisiones, y convirtiendo en una persona diferente.
Cuando se rompe una relación no siempre hay buenos y malos
Todos nos hemos portado mal alguna vez, la cosa no es tan fácil para poder echar toda la culpa a uno. En la serie no se juzga a los personajes por ser infieles, la vida no es tan fácil ni todo es blanco o negro.
¿Quién ha tenido la culpa del alejamiento que lleva a la infidelidad? Hay cuatro personajes, y cada uno tiene sus debilidades.
Cuando dejamos una relación para empezar otra nueva, no siempre vamos a mejor
Un chico nos deja y nos preguntamos ¿porqué? ¿Qué tiene ella que no tenga yo? Igual no es tan guapa, lista, o maja como nosotras o no tiene tantas cosas en común como nosotras teníamos con nuestra pareja, da igual, a veces las personas simplemente necesitamos algo distinto de lo que ya teníamos, no siempre mejor, sino simplemente otra cosa.
Tras el deseo infinito del inicio de la relación es el momento de ver si se puede construir algo nuevo, duradero y feliz.
Por supuesto, seguro que si veis la serie sacáis vuestras propias conclusiones, puesto que la trama está llena de recovecos y matices que hace que el espectador le pueda dar muchas más vueltas. La serie tiene una gran calidad y está avalada por un par de premios Globos de Oro. Os podéis mantener informados sobre ella en Vaya Tele.
Fotos | Cordon Press
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