Mucho se ha hablado de la discriminación de la mujer en el mundo del cine. No es solo el gap salarial entre actores y actrices o la preminencia de los personajes masculinos en pantalla. Las directoras son, quizá, el puesto más débil de una balanza en la que la igualdad es todavía una utopía. Hasta ahora, era solo un secreto a voces. En los próximos meses, puede acabar siendo objeto de una demanda civil en los tribunales.
La Equal Employment Opportunity Commission (Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo) es una agencia federal del gobierno de Estados Unidos cuyo objetivo es hacer cumplir las leyes contra la discriminación, de cualquier tipo, en los lugares de trabajo. En octubre de 2015, esta agencia inició una investigación sobre la escasez de mujeres directoras contratadas por los grandes estudios de Hollywood para dirigir sus películas.
Wonder Woman será una de las pocas grandes producciones de este año dirigidas por una mujer (Patty Jenkins)
Ahora, con la investigación llegando a su fin, han iniciado conversaciones con los grandes estudios, con el fin de evitar llevarlos a los tribunales. Si las conversaciones con el fin de hacer que haya más directoras en la industria fracasan, será la justicia quien tenga que dirimir las responsabilidades.
Las cifras, desde luego, son desalentadoras. Solo un 7% de mujeres dirigieron grandes proyectos en 2016, lo que supone un descenso del 2% con respecto a 2015. Además, solo el 17% de los trabajos tras la cámara en las grandes producciones de los estudios de Hollywood están en manos de mujeres.
Imágenes | Gtresonline, Wonder Woman.
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