La publicidad de Kenzo siempre me ha encantado, ese aire oriental que se respira en los anuncios de Flower o en cualquiera de sus campañas es inimitable. Y para la próxima temporada de otoño, nos trae unas fotos magníficas de Olga Sherer. Tomadas por Raf Simons, el concepto es una repetición obsesiva que visualmente se vuelve atractiva.
En esta ocasión, la inspiración no es tan oriental, sino es una fusión de culturas ya que el escenario son castillos en Edinburgo, Escocia, mientras que algunas prendas y actitudes de la modelo tienen un aire más español que se enmarcan en rojas alfombras de diseños geométricos estilo morisco. ¿No me digan que el bolso de flores no les recuerda a un mantón y que el sombrero no es lo más cordobés del mundo?
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