Un universo onírico con reminiscencias victorianas, o un jardín mágico y misterioso donde la delicadeza de los movimientos de la danza clásica estaba también muy presente. El desfile de Etro para la primavera-verano 2016 está a mitad de camino entre sueño y realidad.
Una colección en la que lo guiños al pasado son sólo un pretexto, un artificio en prendas que muestran todas y cada una de ellas el indiscutible talento de Veronica Etro y su visión estética que da vida a una feminidad moderna y actual.
Una colección que resulta tan romántica como folk, que no se puede decir que pertenezca a un sólo estilo pues es como si fuese un compendio de muchos de ellos.
A la hora de inspirarse, Veronica Etro se ha inspirado en las mujeres en general porque, ¿a quién no le apetecería lucir uno de estos trajecitos ligeros y floridos, o esos amplios pantalones de seda, o los vestidos plisados con encaje y pasamanería con un largo que puede variar desde las rodillas o largos hasta los pies?
Las telas son en su mayoría crespones lavados, linos jacquard, chiffon, y encaje que dan lugar a siluetas fluidas que a menudo juegan con las transparencias y las superposiciones. Vestidos largos, abrigos envolventes como si fuesen albornoces. Pantalones de seda tan cómodos como pijamas.
Los little dresses hasta la rodilla llevan mangas amplias, mientras que los vestidos de noche optan por largas faldas plisadas que rozan los zapatos.
Para accesorizar todas estas propuestas, Veronica ha optado por pendientes pintados a mano con motivos florales, clutchs de piel y pochette fabricadas en tejido bordado, y botas con lazadas romanas o sandalias inspiradas en las bailarinas.
Ver galería completa » Etro (33 fotos)
Sitio oficial | Etro
En Trendencias | Desfiles primavera-verano 2016
