Todos conocemos los esfuerzos de H&M en favor de la sostenibilidad. Entre sus iniciativas eco friendly, destaca el reciclaje de ropa en sus tiendas y las colecciones Conscious, compuestas por prendas fabricadas con materiales reutilizados y sostenibles. Además, en el Informe de Sostenibilidad publicado por la propia marca el año pasado, anunciaban ya su intención de utilizar solo materiales reciclados y energías renovables antes del año 2040.
Además, también el año pasado, entregaron por primera vez los premios The Global Change («el cambio global»), que concede cinco becas, financiadas por H&M Foundation, a equipos creativos de moda que presenten iniciativas para mejorar el medio ambiente. Hoy hemos conocido que H&M Foundation ha elegido ya las cinco iniciativas que serán galardonadas este año. Y nos hemos quedado con los ojos como platos al saber de dónde puede proceder la ropa que usemos en el futuro.
Revolucionarias formas de teñir el tejido denim, textiles solares e incluso cuero hecho con las mismas cepas de uvas de las que procede el vino que nos tomamos después de una dura tarde de compras. Estas iniciativas podrían ser las que más nos llamaran la atención si no fuera por... la tela hecha de caca. Sí, de caca. De caca de vaca. Jalila Essaidi presentó una propuesta por la cual la abundante celulosa presente en el estiércol de origen animal se puede transformar en una tela resistente y suave.
El estiércol animal es una de las principales fuentes de producción de metano, por lo que esta iniciativa cumpliría con los estándares de sostenibilidad de H&M, que ha concedido una cantidad de 150.000 dólares a la impulsora del proyecto para que pueda trabajar en él. Veremos si consiguen que la iniciativa triunfe y, sobre todo, si cumplen con su promesa de que las prendas serán completamente inodoras (nunca mejor dicho).
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