La empresa zapatera fundada por Joseph FENESTRIER en 1895 en la ciudad de Romans-sur-Isère, una pequeña ciudad francesa junto al Parque Natural Regional de Vercors, famoso por estar totalmente lleno de cuevas que sirvieron de refugio a la Resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial, se venía abajo cuando un joven Robert Clergerie toma la batuta en 1978 y la convierte en lo que es hoy en día, un referente mundial de artesanía y diseño de zapatos.
La ciudad alberga el Museo Internacional del Calzado y es aquí donde la firma Robert Clergerie se convierte en pocos años en uno de los tres grandes firmas de zapatos, junto a Charles Jourdan (su maestro, junto a quien empezó su carrera en 1970) y Stéphane Kélian.
Un ascenso increíble ya que fue en el invierno de 1981 cuando se lanza la primera colección, vendida en la tienda del número 5 de la calle Cherche-Midi de París, y pronto inauguraría tiendas en Lyon y Toulouse. A partir de la década de los 90, los puntos de venta se multiplican, desde Tokio a Nueva York.
En 2001, Robert Clergerie se retira, pero su ausencia se deja notar en el producto y por lo tanto en as ventas y la marcha de la firma. El maestro regresa en 2005 con el fin de recuperar el control de la empresa y volver a ponerla a flote. Actualmente se pone énfasis en la creación, mientras que la fabricación se sigue realizando en la ciudad francesa de Romans.
Según el propio diseñador:
El desarrollo de una marca es una combinación sutil de organización y pasión.
Gracias a su amor por el oficio, a la simplicidad de su estilo dirigido a todas las mujeres excepcionales y a su éxito comercial, Robert Clergerie recibió en 2005 el premio del industrial del año. ¿Os gusta el diseño del maestro francés, Robert Clergerie?
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