Ya sé que falta todavía mucho para Halloween pero esto no es una careta de carnaval sino una mascarilla. Seguro que muchos de vosotros os aplicáis mascarillas de arcilla, especialmente ahora que estamos intentando controlar el efecto rebote de acné tras el verano. Os voy a explicar el truco para que podáis retirarla fácilmente.
Estas mascarillas se endurecen cuando se secan y quedan encartonadas en el rostro. Preparad una gasa estéril de tamaño grande (en cualquier farmacia las venden) y tenedla a mano mientras mezcláis la arcilla con el agua. Antes de aplicarla, colocad la gasa estéril encima del rostro, a lo fantasma.
Aplicad la pasta de la mascarilla, la gasa no la váis a notar para nada salvo en ojos, nariz y boca. Esas zonas hay que evitarlas siempre y con la gasa en la cara, más aun. Cuando se seque todo y queráis retirarla, sólo tenéis que tirar de la gasa que sobresale con cuidado. ¡Voilà!
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