Diciembre ha entrado fuerte, con una ola de frío que nos golpea y nos quita las ganas de hacer planes. Solo queremos pasar calentitos el fin de semana en casa, escogiendo películas románticas para ver juntos bajo la manta pero el sexo puede ser también una forma de quitarnos el frío del cuerpo.
Series como Sexo/Vida nos han servido de inspiración, y hasta te hemos hablado de las posturas sexuales más buscadas en Google. En verano nos preocupamos porque no pasaras demasiado calor y ahora ha llegado el turno de encontrar posturas sexuales con las que el frío no será un problema, porque son de esas con las que generamos mucho calorcito.
El arco
Entrarás en calor seguro, porque es una de las posturas sexuales con mucho movimiento y con la que quemarás muchas calorías. Consiste en que os enganchéis el uno al otro, sujetándoos con los brazos. Me explico: quien penetra va a colocarse boca arriba, con el culo apoyado y las piernas flexionadas 90 grados. Apoyará los brazos estirados para el torso esté levantado y la persona que es penetrada se colocará igual, enganchándose.
Para moveros, ambos levantaréis el culo y os mantendréis con la fuerza de los brazos, como si hiciérais una flexión pero invertida. Entraréis en calor no solo por la excitación, también por el esfuerzo.
Bajo la ducha
¿Y si practicamos bajo una ducha caliente? Las posturas de pie en la ducha son divertidas, excitantes y entraréis en calor seguro. Podéis hacer una postura contra la pared de la ducha (como el clásico perrito pero de pie) o probar con los bailarines (de pie y frente a frente).
Sexconsejo: si practicáis sexo en el agua no olvides un lubricante con base de silicona que también nos servirá para prácticas anales, como este pjur o este otro de Durex.
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La flor de loto
Además de una de las posturas más íntimas, esta posición es perfecta porque estarás abrazada a tu pareja y es muy sencilla. Sobre la cama, la persona que está abajo se sienta con las piernas cruzadas y la que está arriba se coloca encima, abrazando su cintura con sus piernas a horcajadas, como si fuera una variación de la postura de la Amazona.
Es importante que estéis bien pegados y que los movimientos vayan al compás. Prueba a empezar muy lento en esta postura, porque es perfecta para sentirlo todo y para generar una conexión muy especial con tu pareja. Os tenéis el uno frente al otro y bien pegados, así que no puede ser más romántica.
El misionero
Pegaditos. Así estaréis con este clásico de las posturas sexuales en la que os encontraréis frente a frente y cuerpo contra cuerpo. Uno tumbado boca arriba y el otro encima, así que de esta manera os daréis calor. Al ser una postura en la que hay poco movimiento, podéis practicarla bajo el edredón sin temor a destrozar la cama. Un extra: desde esta postura y si sois una pareja de pene-vagina podéis probar la alineación coital. Merece mucho la pena.
El 68
Como ya te hemos dicho no todo es penetración en el sexo, y esta postura es un ejemplo ideal. Aunque el 69 nos encanta y hacerlo bajo el edredón para no pasar frío puede ser genial, hoy traemos una variante diferente y divertida. En el 68 tendremos la misma postura del 69 pero la persona que está arriba se girará y se colocará mirando al techo solo pensando en disfrutar.
La cuchara
Tumbada sobre la cama, de lado y bajo la manta más calentita que tengamos. Así comienza esta postura en la que nos colocaremos bien pegaditas a nuestro pareja que se situará justo detrás nuestra, con su pecho apoyado sobre nuestra espalda. Ideal para que la persona situada detrás estimule el cuerpo de la persona que está delante en cualquier zona erógena.
No pienses en esta postura solo con penetración, es perfecta para masturbar a tu pareja, para estimular todo su cuerpo y para practicar ese slow sex del que tanto se habla ahora.
La cabalgata
Seguimos bajo las mantas, sin pasar ni gota de frío, y probamos una posición ahora que nos pide un poco más de esfuerzo físico que el misionero y la cuchara, porque quien se coloque arriba trabajará el core a fuego. Nos colocaremos como con la postura de la cuchara, pero esta vez mirando hacia arriba.
Es una ligera variación de la amazona invertida porque quien está arriba se colocará con las piernas estiradas y manteniendo el torso ligeramente levantado, como si estuviera haciendo Pilates. Si te cansas, siempre puedes echarte sobre tu pareja y dejarte abrazar.
Nota: algunos de los enlaces aquí publicados son de afiliados. A pesar de ello, ninguno de los artículos mencionados han sido propuestos ni por las marcas ni por las tiendas, siendo su introducción una decisión única del equipo de editores.
Fotos | Yana Lizunkova en Unsplash, Amigos con derechos, Amelie, Giphy
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